De a poco he ido encontrando el sentido de las cosas simples de la vida.
Trato de disfrutar cada segundo, cada beso, cada regalo, por simple que este sea.
Amo la primavera... pero cada estación tiene su encanto.
Me encanta la risa, por eso valoro los momentos que paso con amigos.
Trato de llegar contenta a la oficina, y dar gracias por tener trabajo, aunque a veces me cuesta despertar en la mañana.
Trato de enseñar a mis hijos que un juguete hecho con cariño, es tan valioso como la barbie mas cara.
Y que muchas veces podemos suplir una necesidad... sin tener que salir corriendo a comprar.
Que no hay que tener el celular mas nuevo y mas complicado, sino el que todavía nos sirve para hablar, aunque sea viejito.
Y así.... hagamos un ejercicio... valoremos lo simple... disfrutemos a concho a nuestra familia, nuestro jardín aunque sea pequeño, nuestro sofá aunque esté viejo, nuestro auto aunque no tire pinta, pero son cosas que noblemente nos siguen prestando su servicio.
Respetemos lo que tenemos porque es una gracia de Dios.
Eso.... las invito.